Al final de un camino recto Por Felix Meiller Cuando salió del poblado, y encaró la ruta, se topó con una larga lengua plateada que se hundía por allá lejos y que el habría de recorrer, con el anhelo de llegar… ¿Llegar adonde? Se preguntó mientras se acomodaba en la butaca del auto, y miraba los brillos que el sol le sacaba a las piedras al costado del camino. Era el mediodía del verano más caluroso de la historia, el brillo era demoledor por lo que antes de subir al asfalto, reguló el aire acondicionado, se colocó los lentes para sol, probó el motor de su vehículo dándole un par de aceleradas. Se puso los guantes de conducir, tomó el volante se estiró un poco y satisfecho con la prueba colocó la palanca de cambios en posición, apretó el acelerador, el coche comenzó a tomar velocidad, lo hizo lentamente al principio como para disfrutar del poder que emanaba de su pie derecho. Ya en movimiento y todavía despacio, acomodó el asiento para adaptarse mejor al manejo, y s...