Feliz primera vez

 Las palabras siempre ganaron la batalla entre lo que escogía hacer para entretenerme. De pequeña, las garabateaba en pedazos de papeles sueltos: papeles, lápices y lapiceras, siempre fueron un tesoro que me llevaron a la avaricia. Me es difícil compartirlos, son como partes mías difíciles de desprender y poder darlas. 

Palabras sueltas, oraciones aisladas, cuentos que aprobaron y felicitaron los docentes, canciones, tantas canciones, concursos, obras de teatro, todo un mundo escrito y a la vez, bastante anónimo. El tiempo quiso que ahora sea yo la que alienta a los niños y a los jóvenes a que sientan el amor por unir las letras y poder hacer magia con ellas.

Feliz me siento por haber podido retomar este vicio de poner en palabras mis sentimientos, mis asombros, mis nostalgias, mi futuro y  más feliz aún porque me encuentro hoy reunida con otros que como yo, disfrutan de armar y desarmar el lenguaje que nos une y nos hace más humanos cada día. 

Arranquemos este camino y dejemos que nos lleve a donde quiera

Soy Rosana, docente, Yola, Yo, la peor de todas.